Tres parejas (Carlos Donigian, Esteban Lamarque, Pablo Martínez, Yanina Martino, Jorgelina Pérez y Javier Torres Dowdall) deciden pasar un día al aire libre. Si bien los seis se conocen hace tiempo, ellos no son amigos, sólo se toleran.
Predispuestos a tener un buen momento, paran en un bosque y preparan carne a la parrilla a la hora de la cena. Pero entre comentarios sarcásticos y confesiones crudas, el ambiente se irá tornando algo tenso.
Como un llamado, de repente, un incendio los acecha. Y de allí, una sucesión de postales trágicas. Gritos, los cuerpos quemados, rastros. Todo se vuelve tristeza negra, animalidad, ceguera inconsciente, fragmentos de las personas que eran en medio de los zumbidos de las criaturas del bosque.
La autora alemana Anja Hilling escribió una pieza cruda, intensa. Carla Llopis la dirige en su versión argentina, con un grupo de actores quienes, además de recorrer bien un texto lleno de imágenes, cuentan desde lo físico. Un correcto y disfrutable trabajo integral. Así, una escenografía que remite a figuras geométricas, que se desplaza, se vuelve funcional e interesante en lo jugado.
Una puesta original para una obra que llena de preguntas, e interpela sobre las miserias humanas y las situaciones extremas. Cuestionamientos, de esos que quedan, por un tiempo después que se prende la luz de la sala.
Ficha técnica:
Actores: Carlos Donigian, Esteban Lamarque, Pablo Martínez, Yanina Martino, Jorgelina Pérez y Javier Torres.
Dramaturgia: Anja Hilling.
Dirección: Carla Llopis.