En los vestuarios de una pileta, dos profesores de natación (Martín Slipak y Luis Gritti), la dueña del lugar (Eugenia Alonso) y el padre de uno de los alumnos (Nelson Rueda) discuten fuertemente sobre el significado, y las consecuencias, del beso ¿inocente? de uno de los entrenadores a un niño, quien tiene miedo a meterse en el agua sin flotador. Dudas, argumentos, confianzas, reputaciones y fantasmas sobrevuelan el espacio clorado de este lugar “limpio”.
Algo debe haber pasado en nuestra sociedad para que, en menos de dos décadas, un acto aparentemente inofensivo pueda despertar todas las alertas, y convertirse en motivo de sospecha, y sobre eso, “El principio de Arquímedes” también interroga.
El texto del español Josep María Miró situado en este contexto, metáfora de nuestra sociedad aséptica al exceso, construye una historia a partir de un hecho que hará que el espectador tenga que tomar partido, al no dejarlo indiferente. ¿Culpable o inocente? Situación la cual, a partir de la presencia de las redes sociales en la cotidianeidad de todos, cobrará enorme dimensión y desencadenará imprevisibles consecuencias.
La cuidada dirección a cargo de Corina Fiorillo cumple con una interesante tarea. La construcción de un texto fragmentado, con un ir y venir de la historia, y una puesta bifrontal, hace de la obra algo novedoso. Todoestá apoyado también en intensas actuaciones, para los climas que el guión requiere.
“El principio de Arquímedes” se estrenó en España en 2012, en el marco del Festival Grec de Barcelona. Su llegada a Buenos Aires fue en 2014, en la sala Cunill Cabanellas del Teatro San Martín. Luego de hacer temporada de verano 2016 en Mar del Plata y algunas funciones en la sala Xirgu – UNTREF, con la incorporación al elenco de Luis Gritti y Eugenia Alonso, la obra vuelve al Espacio Callejón.
Ficha técnica:
Actores: Martín Slipak, Luis Gritti, Eugenia Alonso y Nelson Rueda.
Dramaturgia: Josep María Miró Coromina.
Traducción: Eva Vallines Menéndez.
Dirección: Corina Fiorillo.