Una madre (Ingrid Pelicori) y dos hijos (Malena Figó y Agustín Rittano) arrastran contradicciones internas marcadas por su pasado y el anhelo de un futuro distinto.
Amanda intenta digitar a la joven y tímida Laura, quien se refugia en su colección de figuras de animales de cristal; mientras que Tom, el mayor de su descendencia, intenta dejar atrás la rutina agobiante de su trabajo en una zapatería y su debate interno entre el deber de cuidar y sostener a su familia, o dedicarse a su verdadera pasión, la escritura.
Una cena con Jim (Martin Urbaneja), un compañero de trabajo de él, optimista y emprendedor, provocará un simbronazo en la casa, y será en quien se depositará la esperanza de un futuro para la joven del hogar.
El clásico de Tennessee Williams es una exploración, sumamente poética, de los contradictorios vínculos familiares, su luz y su sombra, de los sueños perdidos, y su nostalgia, de los deseos irrenunciables, y su precio. En definitiva, la conmovedora búsqueda de un sentido para la vida.
Ellos se aman, se detestan, se comprenden y no.
La hermosa versión de Mauricio Kartún, quien respeta fielmente el original, tiene, en actuaciones y dirección, esas sutilezas que emocionan.
Una puesta con merecidos elogios y aplausos de pie.
Ficha técnica:
Actúan: Ingrid Pelicori, Malena Figó, Agustín Rittano y Martín Urbaneja.
Dramaturgia: Tennessee Williams.
Versión: Mauricio Kartún.
Dirección: Gustavo Pardi.
Dirección de arte: Stella Maris Santiago
Diseño de vestuario: Julio Suárez
Diseño de escenografía: Cinthia Chomski
Diseño de iluminación: Horacio Novelle
Diseño gráfico: Stella Maris Santiago
Música original: Silvina Aspiazu
Diseño de sonido: Silvina Aspiazu
Fotografía: Nacho Lundadei – Federico Sosa
Asistente: Ramiro García Zacarías – Matías Noval
Asistente de producción: Glenda Aramburu
Asistente de dirección: Carito Krivoruk
Producción: Alejandra García