Para una página como “Escenarios Nacionales”, cuya bandera es compartir nuestro teatro federal, estar presente en una Fiesta Nacional del Teatro fue un sueño hecho realidad.
Vivimos 8 días invadidos por las emociones.
La 37ma. edición en este año tan particular tuvo dos sedes, Catamarca y La Rioja. Por primera vez en su historia, dos provincias fueron las anfitrionas de más de 50 obras y 30 actividades especiales. En las ciudades se respiraba teatro, en todas sus rincones.
Cerca de 32.000 personas pasaron por las distintas salas y espacios culturales locales. Con sus fuertes aplausos acompañaron a los elencos, que nos regalaron sus distintos quehaceres, con sus historias por contar.
Un encontrarse que es único. Sensaciones que sólo pueden vivirse en lugares así.
Un coincidir en la defensa de los 40 años de democracia, con promesas de hacerlo con alma y cuerpo, ante tanto futuro incierto.
