El artista falleció el lunes en la ciudad de San Luis, donde residía y trabajaba también como docente, según el comunicado emitido anoche por la Asociación Argentina de Actores.
Desde su Bahía Blanca natal recorrió varias ciudades del país con su arte, hasta que decidió radicarse en San Luis; en su trayectoria artística, social y cultural, participó como actor, director y operador técnico en numerosos espectáculos.
Fue un impulsor local del teatro de objetos, para lo cual formó el Pequeño Teatro Reincidente, junto a Claudio Ferreyra Barro, con el que presentaron espectáculos como “El viejo nombre del final”.
Formó parte del Teatro Estudio Arte (TEA), del grupo de investigación y creación El Quemadero y coordinó el grupo Teatro Pared, entre otras actividades.
Fue un reconocido docente de teatro comunitario; profesor del Instituto Nacional de Teatro en su filial regional y dictó clases en centros culturales y escuelas de la provincia de San Luis. Formó parte de la Fundación Par 21, dictando clases a niños y niñas con síndrome de Down; además trabajó en la Dirección de Cultura local.