La diva celebra un nuevo natalicio en Punta Del Este, luego de su despedida de las tablas.
Desde su debut en 1971 con «Las mariposas son libres», junto a Rodolfo Bebán, Susana estuvo siempre ligada al teatro. Con algunas intermitencias, la actriz tiene en su haber obras que fueron éxitos de taquilla, que van desde comedias, revistas y hasta musicales.
Sin embargo, luego de la primera función del reestreno de «Piel de Judas», en el Enjoy de Punta del Este, el pasado viernes 22 de diciembre, la diva confesó: “Esta será mi última temporada sobre las tablas”. El por qué de esta decisión es que ya no quiere mantener el ritmo que las funciones le exigen. “Me retiro del teatro porque agota, te juro que te agota”, había contado.
Así Susana el sábado se subió por última vez a un escenario, acompañada desde la platea por su hija Mercedes Sarrabayrouse, su nieta Lucía Celasco, sus hermanos Carolina y Patricio Giménez Aubert y varios de amigos.
Con una ovación de pie de los presentes, una sala colmada del Hotel Casino Enjoy, emocionada recibió un ramo de rosas amarillas de parte de Gustavo Yankelevich, productor de la obra.
“Él es el culpable”, comenzó diciendo Susana, en referencia al empresario, su amigo. “Todo lo que me propone casi siempre lo consigue porque en esto tenía razón, aunque había una que no me gustó, de casualidad, la única”, comentó ante la risa del público presente. “Esta me encantó, y tenías razón, a la gente le encanta, sonríe, y me parece que estamos viviendo todos un momento en el que hay que reírse un poco realmente”.
Y continúo: “Quiero agradecer a todos los que están acá y especialmente a todo Uruguay que me recibió con los brazos abiertos, y con tanto cariño que a veces no puedo ni salir porque me agarran hasta en la farmacia. Ahora porque estoy maquillada pero yo tengo una cara que parezco horrible y le digo a la gente ‘no puedo sacarme una foto, ¡estoy sin maquillaje!’, pero no importa, me la saco igual”
Antes de terminar, la diva expresó su amor por el público: “Los amo a todos, me han recibido y me han despedido de una manera muy cálida, gracias».